Implementa los protocolos de sanidad en un plan piloto para recibir a estudiantes en las diferentes facultades y unidades académicas.
La Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT) inicia este lunes 7 de junio el Verano Práctico Presencial, en un plan piloto que ha establecido la máxima casa de estudios del estado para el retorno gradual a las actividades escolares presenciales en sus facultades, unidades académicas y escuelas.
También se pone en marcha en la modalidad de clases en línea correspondiente al período 2021-2, que ofrece a los estudiantes la oportunidad de cubrir asignaturas de su plan de estudios.
La Universidad abrió inscripciones sin costo a las prácticas de verano en la modalidad presencial atendiendo las necesidades de los alumnos que requieren complementar actividades de laboratorio o de campo, y que por la contingencia sanitaria no pudieron realizar en los períodos 2020-1, 2020-3 y 2021-1.
Con un registro de 127 grupos se desarrollarán las actividades presenciales, que ofrecen la oportunidad al alumnado de realizar sus prácticas durante el período comprendido del 7 de junio al 22 de julio.
Respecto a las clases de verano en línea, la Universidad abrió inscripciones sin costo para las materias que, de acuerdo con la demanda, han ofertado las facultades y unidades académicas, teniéndose un registro de 515 grupos que tomarán clases a distancia.
Por otro lado, y con base en los planes de retorno gradual a clases que los órdenes de gobierno estatal y federal han venido considerando, las diferentes dependencias académicas y administrativas de la UAT han estado adecuando sus instalaciones conforme a los protocolos de sanidad.
En este aspecto, a partir de la cobertura de vacunación contra COVID-19 para el sector educativo, desde el pasado 1 de junio se puso en marcha el retorno del personal en las distintas dependencias de la Universidad, estableciéndose los protocolos con recomendaciones para aforos y prevención sanitaria como sana distancia, uso de cubrebocas y gel antibacterial, chequeo de temperatura, desinfección y ventilación de espacios físicos, entre otros.
Esta fase piloto permitirá también conocer las incidencias que se pudieran presentar al realizar un regreso gradual, responsable, voluntario y seguro a las aulas, priorizando la salud física y emocional de la comunidad educativa con acciones de prevención de riesgos.
